Labradoria está de luto

Elis a los 5 meses
Ayer se extinguió para siempre la llamita, cada vez más débil, de nuestra dulce dulce Elis. Ella fue una luchadora desde sus cuatro meses de vida, cuando a menos de un mes de haber llegado de Brasil se le diagnosticó Insuficiencia Renal, que ya tenía características de cronicidad. Seis veterinarios opinaron que ella no viviría, que ya no había nada que hacer. Por suerte, el séptimo o el primero, quien además era SU veterinario decidió que ella se merecía una oportunidad y allí comenzó el desafío. Elis mejoró y tanto que por casi dos años nadie podía percibir que ella estaba enferma a no ser por los valores en los análisis de laboratorio, que eran terribles e implacables. Dos años de comida especial, con días en que había que darle uno por uno los granitos por la gastritis; Ranitidina, Metoclopramida, Sulfato Ferroso todos los días. Eritropoyetina una vez por semana. Pero fundamentalmente, lo que más se le dio y ella a su vez nos devolvió a nosotros, fue mucho amor. Elis era una perrita feliz y era puro corazón. Ella era la primera en nunca sentirse enferma y seguir jugando y saltando y corriendo. Un ejemplo para todos nosotros, esta negra.
Ya hace un mes aproximadamente, sus riñoncitos ya se empezaron a quedar sin ninguna reserva... Esta semana ya no quiso seguir comiendo y apenas si tomaba agüta. No quisimos que sufriera más. Nos sentimos muy felices de haber podido darle esa oportunidad, por corta que fuera y de que ella nos haya acompañado estos dos años. Supongo que esto es lo que dicen del amor, que es felicidad y sufrimiento al mismo tiempo. Elis nos hizo sufrir mucho, pero la amamos aún más.
Para todos los que hacemos cría de selección, este tipo de enfermedades y defectos son terribles, pero hay que saber que suceden a veces al azar, y que por más que uno tome todos los recaudos posibles, pueden aparecer. Donde surge la humanidad de cada uno es en qué hacemos con estos seres... No podemos dejarlos morir simplemente porque no son perfectos. Nosotros decidimos apostarle a Elis y cuidarla con todo el esfuerzo y dedicación que eso implicó. Ella nos devolvió cada segundo y centavo que le dedicamos, multiplicado por mil.
Muchas gracias en primer lugar a Roberto y Renata por habernos permitido conocer a este ser hermoso. Gracias a Francisco y a todos los chicos de la vete por ayudarnos en los peores momentos y por recordarla. Gracias a Blossom, su amigo más inseparable, y a todos los perros por haberla querido tanto. Gracias a todos los que la conocieron o conocieron su historia y se conmovieron con ella.
Te vamos a extrañar, Elis! Gracias por todo!